Siempre quise ir de campamento en el desierto y la idea de la actividad fue bien recibida por Fer y sus hijos así que conseguimos todo lo necesario para sobrevivir una noche en el desierto lejos de la civilización y de la tecnología y de tiendas para comer.
Nuestro paseo para llegar al sitio de campamento no fue tan largo, vivíamos en Arjan y el sitio de acampada era cerca pero paramos para comprar fósforos y algo más de comer y picar en la noche.
La entrada al sitio de acampada era medio escondida, no se sabia bien pero vimos un sitio de aparcar muy solo y nos metimos.
Bajamos entre todos las mil cosas del auto y elegimos un sitio para poner nuestra tienda sin correr peligro de los 4x4 que estaban cerca (Nuestro miedo era que una camioneta nos pasara por encima). Fer compró antorchas para mantenerlas encendidas todo el rato y así alertar de nuestra presencia.
El hijo mayor de Fer se emocionó con la ideal de campamento en el desierto y se disfrazó de morito local.
Hicimos nuestra tienda y luego nos ocupamos en comer, Fer compró para cocinar y nos dimos una buena comida.
Sip, allí íbamos a dormir 4 personas. |
Jugamos al volleyball y fútbol |
Todos rodamos por las dunas como nenes. |
Hicimos chichi detrás de una duna enorme que tenía un agujeri y un medio arbolito y arbustos... jeje mi miedo era por si salía alguna culebra en medio de la noche.
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Por la noche, Fer y yo salimos de la tienda a mirar las estrellas, fue increíble, me dejó con la boca abierta... Claro, en medio del desierto no hay edificios con luces que impiden apreciar las luces del cielo, la luna... Se podían contar miles!!!
Nadie quería guardar las cosas, daba pereza... Pero ya hacía calor y el hambre llamaba... |
Se veían camellos al lado del camino... |
El campamento estuvo genial como actividad familiar, la pasamos increíble y nos divertimos muchísimo. Era la primera vez que veía tanta arena junta y la compañía fue perfecta. Nos pareció tan buena experiencia que repetimos al año siguiente.
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